Cyril Blažo – exposición doble de

La personalidad de Cyril Blažo (nacido en 1970 en Bratislava) es una peculiar linea de trabajo visual de la joven orientación post conceptual que apareció en los escenarios de Eslovaquia durante la década pasada. Ya durante sus estudios en la Escuela Superior de Artes Plásticas en Bratislava (1988–94) en cooperación con Boris Ondreièek y Stano Danèiak hijo, formaron una agrupación libre BLONDIAK, donde intercambiaban mutuamente ideas, gags y juegos de palabras (expusieron en Bratislava durante los años 1991-1994 y 1996). Siguieron varias invitaciones a eventos nacionales y extranjeros que comprobaron su potencial artístico: Zwischen Objekt und Installation, MAO Dortmund 1992; Blue Fire (3ª Bienal del Arte Joven), GHMP Praga 1999; Carne joven- sangre (no) mala, GS 26 Ostrava 2000; Check Slovakia!, NBK Berlín 2004; 2ª Bienal de Praga, Praga 2005, etc.
Cyril Blažo cambia los códigos de signos viejos, los multiplica en un juego libre y le gusta crear nuevos para poder aplicar su ingeniosidad, ironía y significados borrosos. Sus ”sketsches” visuales, escenas cómicas y extravagancias funcionan como el percusor de un rifle, que con un simple clac origina una explosión. A menudo establece situaciones banales y absurdas de carácter híbrido donde van desapareciendo fronteras mediales y diferencias entre un original, una copia y un ”cacaraqueo” ordinario. Blažo suele”explotar” ilustraciones y reproducciones viejas de libros y revistas, aprovecha su propia colección de imágenes viejas sin una relación exacta con la época de su surgimiento. Desde este retro y repro-archivo saca una mezcla de aforismos plásticos, comentarios fuera de contexto, humor ingenuo y picante donde predomina un juego divertido, abreviaturas y humor inteligente. Del montón de libros de anticuario y revistas antiguas de los años 70-80 saca golosinas. En esta postproducción artística, un momento importante es la selección misma, y la nueva articulación del signo, aprovechando los intersticios del conocido texto cultural. Cruces de imágenes e ideas, su impresión paradójica es espacio para sus pícaros sketsches y fuertes ”remaches”. Lo que ”llama bLondýn”(en eslovaco, blondýn quiere decir rubio), el conocido hit-breaker, quien trabaja con las manos en los bolsillos. Resuelve las cosas sonriendo ampliamente y con el lema tranquilo ”tú ya sabes lo qué pienso”. Aporta soluciones sencillas como el huevo de Colón, inocentes como la manzana de Eva. Encerrado en su cueva desordenada en un edificio prefabricado, produciendo el “reino de ocio” casero, algo entre el País de Holgazanes de Brueghel y el Elogio a la pereza de Malevich. Aplica a su vez el concepto ”alcoholístico” donde mover un dedo ya es una hazaña. Cada idea es una gran bomba.
Con el transcurso de los años va creando una colección no muy extensa de dibujos, xerocopias, fotocollages e impresos, así que su retrospectiva cabe sin dificultades en un embalaje. Sus obras se pueden dividir en varias esferas. El primer grupo de trabajos es la apropiación de otra obra sin intervenir en ella, sólo introduciéndola como ready made, y llevándola a otro contexto. Se trata de la apropiación de ideas ajenas que ya habían sido expresadas mejor por otra persona. Así surgen unos pequeños ”chistes pesados” visuales que dan directamente a la cabeza: presentación de un papelito limpio como Plafón (1999), fotografías pegadas y letras de periódicos y cartas encontradas (Ján Mistrík, 1997; Actores y cantantes, 1999; Cuadernos de una muchacha desconocida, 2004), viejas fotos en blanco y negro (Armamento y A través del vidrio, los dos del año 1994). El punto paradojal de esta serie son las fotos de color llamadas Pinacoteca (2003), donde Blažo presenta una serie de pequeños cuadros para colgar, descargados de Internet, y que aparecen en las paredes en los fondos de escenas pornográficas. Así logra que pinturas famosas o paisajes cursis a veces tapen detalles de cuerpos sexy y caras exaltadas. Así se mezcla la develación con lo oculto y el ”fondo hermoso” adquiere una nueva dimensión erótico-cultural.
En el segundo grupo de obras es posible incluir trabajos con una intervención del autor, con collages en dos o varios planos. Cyril simplemente cosecha donde no ha sembrado pero donde sí ha acertado. Corta, y lo hace enérgicamente. Del archivo visual saca cualquier cosa de un tirón. Pequeños impactos, avances o sólo la inclusión de algún título abre, sin embargo, nuevos cuentos y fragmentos de significados: cajones y gavetas vacías presentadas como Vacaciones (1994), el girar en 90 grados del monte nacional para crear el perfil de una cara (Perfil 1, serie Kriváñ), 2002), un folio amarillo transparente sobre un tapete con un zeppelín con el título: Quién tiene hepatitis, ve todo en amarillo (2003), o la foto de una cara iluminada con ojos cambiados (Lucifer, 2002). Blažo prefiere cuentos sin terminar y situaciones no explícitas. Vistas indiferentes y poco claras dejan espacio para la característica ”doble visión” fuera de foco. Estas exposiciones dobles sobre cuentos chistosos típicos de cervecerias, aportan ”encuentros cercanos del tercer tipo”: una reunión de una cabra con una cruz (Cabra y cruz, 1999), encuentro de una muela-silla con un sillón de dentistas ensangrentado (Silla, 1992), un muñeco dibujado cayéndose fuera de un sello postal (Excursión con un suicidio, 2000), o el sol en confrontación con vistas ordinarias de piscinas y la caída de Ícaro (Caída, 1999). A menudo se trata también de una violación de convenciones y tabúes, a veces con un toque de humor negro. En el escenario aparecen cabezas de mujer con maquillaje clavadas en palos de madera, por los cuales chorrea sangre (Todas a la vez, 1999), dos figuras de futbolistas sin cabezas que juegan con una cabeza en vez de pelota (Juego con la cabeza negra, 2003), el pequeño Jánošík clavado en un ganchito de pesca como anzuelo para un pez con muchos dientes, “Sin lío” ( J, 2002).
El tercer grupo de las obras de Blažo lo forman sus propios dibujos, comentarios y microcuentos esbozados, por ejemplo, la serie de dibujos menudos con presentación torpe de composiciones de figuras (Cuaderno de esbozos, 1991-93), dos osos abrazándose con una botella de ron, dibujados en un espléndido papel dorado (Amigos, 1999). Especialmente para la exposición Checoslovaquia preparó una obra característica donde las mascotas checo y eslovacas de un cuento nocturno para niños tienen relaciones sexuales durante el tiempo de la presentación de este programa infantil en la TV (Noche; Noche 2 (1 horas), 2003). Inesperadamente notamos hasta varias versiones de motivos de trabajo: una mujer pasando ladrillos sobre un montón de mantillo (Trabajo 2, 1994), o la figura favorita de un sepulturero excavando con la pala (Trabajo, 1994; Trabajo, 1999), etc. La excavación de pozos y tumbas tiene su poesía y una fuerte dimensión sacral. Sin embargo, Cyril sigue buscando la esencia de las cosas, y eso ”sí es trabajo”. No hay un loco más grande que el que busca donde no ha guardado nada. No hay un loco más grande que un artista que busca donde no ha dejado nada.
Además de comentarios despreocupados aparecen también ciertas cuestiones existenciales, una pequeña depresión privada como una dosis mortal del optimismo vital (marcas de los puntos mortales en el cuerpo (Puntos mortales del hombre, 1996), un collage redondo de frutas podridas como paralelo a la Naturaleza muerta tradicional (1999), una mano de esqueleto con frutas jugosas (Naturaleza muerta 2, 1999), o una Bandera negra solitaria (2002).
Así que el mencionado Cyril B. sigue cometiendo bufonadas, inaprehensible en sus ideas e imágenes. El lema de limpiapisos y modernistas: ”Mantengan la limpieza” lo cambia con un ligero gesto irónico al: ”Mantengan la (no) limpieza eterna” , y hasta ahora logra cumplirlo en un cien por ciento, pues sigue haciendo arte sin compromisos.

01.03.2005